Criterios surge de la oportunidad de
formar una alternativa más y mejor, se está tratando de hacer, para ejercer el oficio
del periodismo impreso político como una forma de realizar y proyectar las intenciones
democráticas de su director Johnny Oliver Quintal, egresado del periódico Por
Esto! , cuyo director es Mario Renato Menéndez
Rodríguez, fuertemente posicionado y palero de los intereses del ex
gobernador yucateco Víctor Cervera Pacheco que ahora reniega- y alejado por
circunstancias políticas-laborales ante la marginalidad de este medio por ser parte de
los intereses del anterior sexenio. Hace dos años, el director de Criterios junto con Socorro Chablé, la actual subdirectora y ambos
obreros del periodismo escrito, se dan a la tarea de iniciar la construcción de una nueva
forma de ejercer el quehacer informativo en la prensa yucateca. Recorren a intelectuales
del medio, académicos, personeros de la praxis
política de distintas corrientes y, a profesionales del oficio para tratar de encontrar
una propuesta significativa que les ayudase a aterrizar la idea de mejorar la situación
imperante de hace dos años. Consideran pertinente la formación de una revista sobre
temas políticos y culturales como instrumento nuevo para cumplir con la función de
formar opinión constructiva del acontecer.
Algunos escuchan, otros opinan y hay gente que
calla y prefiere estar al margen del nuevo periodismo local que Criterios
pretende hacer creer. Se abren pero también se cierran las puertas, la envidia del
director del Por Esto! se deja ver claramente, al invitar nuevamente a Johnny
Oliver a ser parte de las filas de su antiguo progenitor en materia laboral. Con la
terquedad que lo caracteriza el ahora director de Criterios acepta como colaborador
de un espacio editorial, pero no renuncia a la idea de formar su revista a lado de
su compañera Socorro. Mario Renato Menéndez lo utiliza, lo engaña con la falsa idea de
hacerlo ver como un sobresaliente columnista del rotativo para únicamente sacarle la
información tras bambalinas que los destacados periodistas conocen y saben utilizar en el
momento apropiado para causar noticia y formar opiniones. De lo anterior se sabe la
conformación de un periodismo más sano siquiera del anterior y no un títere de los
intereses de los Menéndez.
Por otro lado, el Diario de Yucatán, como reaccionario de los
intereses de un buen ejercicio periodístico y camaleón de la política yucateca, bajo su
escudo "conservador" obstaculizó en todo momento el surgimiento de esta
revista. Lo mismo hizo otro magazine de la dividida y conflictiva con su seno
consanguíneo familia Menéndez, la Revista Peninsular bloqueaba a sus inicios las ventas
de este medio. Compraba las revistas Criterios para que el lector crítico no se
enterase de lo acontecido en las páginas de investigación, el prominente trabajo de
cuestionamiento a las irregularidades del periodismo local y de las formas de hacer
gobierno, muy en particular, del Partido Acción Nacional (PAN). Quizá ese fue su error
de esta revista. Vinculó todo su periodismo de investigación a cuestionar a una fuerza
política importante en Yucatán, muy en particular en la ciudad de Mérida.
Paulatinamente en las hojas de esta revista se fue filtrando la información oficial y la
propaganda del gobierno de ex gobernador Víctor Cervera Pacheco. Compraba páginas
completas para su difusión y las obras realizadas en su sexenio y criticaba a través de
su persona y su director de comunicación social al director cuando le
"pegaban", algo muy común en la relación Prensa-Estado.
Al buen entender, esta revista se estigmatizó de oficialista por atentar contra los
intereses políticos de una fuerza política y descuidó su seno. Provocó que la llegada
a sus páginas de gente vinculada con el PRI, las cuales descargaban su ira contra la
ceguera periodística del Diario de Yucatán y el Por Esto!, el ejercicio de crítica y
reflexión decreció y desmeritó el periodismo de investigación que nos habíamos
propuesto realizar a cada paso y en cada salida de ejemplares, a toda costa y sobre
intereses netamente partidarios y políticos. Criterios empezó a ser una prensa
marginal, un instrumento del poder priísta para sus intereses particulares. ¿Quizá era
necesaria esta relación para acallar voces que nos humillaban? 1¿En qué momento nos
descuidamos y empezamos a estigmatizarnos? ¿Era necesaria esta relación con el
PRI-gobierno de aquel entonces? ¿Fuimos lo autosuficientes en capital económico como
para no depender del capital de gobierno? ¿A qué conllevó este giro?
Varios fueron los planteamientos, con detenimiento nos pusimos a pensar diversas personas
ligadas a esta revista lo acontecido. Por intereses particulares, un servidor se ausentó
de la Yucatán (México) para laborar y cumplir con un posgrado, mi cercanía y contrapeso
para con los intereses partidistas se relegaron. Quienes permanecieron vislumbraron una
relación conflictiva con los maniqueísmos de la política y la provocación del choque
cotidiano con el ahora gobernador de Yucatán. Jamás rompí porque creo en la función
que paulatinamente Criterios ha recuperado y por la necesaria profesionalización
de sus colaboradores en materia deontológica. Por la necesidad de crear valores
fuertemente posicionados en este medio impreso y on line también. Pero la necesidad
conlleva a pensar en cómo fue el pasado y la intención de provocar el cómo será
nuestro futuro, ¿dejaremos el umbral de la marginalidad e iremos juntos hacia un nuevo
periodismo independiente?¿cómo romper con el estigma y lastres del pasado vinculadas a
una formación persistente? (sigue)
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